Esta receta se ha convertido en una de las favoritas en mi casa. A mis hijas les encantan y la quínoa ayuda a que queden super esponjosos. Los muffins han resultado una opción ideal para enviar en la lonchera de mis hijas.
Son una buena alternativa de merienda o antojo para las personas que no consumen gluten o lácteos, ya que pueden ser elaborados con leche vegetal y harina de avena, arroz o espelta. Si el gluten o la leche no son un problema para su salud o la de sus hijos, se pueden preparar usando leche de vaca y harina de trigo y de todas formas quedan deliciosos. Los invito a ensayar esta receta y verán que a pesar de contener tan poco azúcar, los muffins quedan suaves, esponjosos y deliciosos.
Aquí les dejo la receta. Si se animan a hacerla, por fa cuéntenme que tal les parece.
Ingredientes:
1 taza de harina de arroz o de avena
½ taza de quínoa cocinada
2 bananos maduros
¼ de taza de azúcar
½ taza de leche vegetal (almendra, arroz, avena etc.)
1 huevo
3 cucharadas de aceite de coco u otro aceite suave
1 cucharadita de extracto de vainilla
1 cucharada de polvo de hornear
½ cucharadita de canela
½ cucharadita de sal
Proceso:
- Cocinar ½ taza de quínoa en agua y dejar enfriar.
- Precalentar el horno a 180°C (350°F).
- En un recipiente combinar todos los ingredientes húmedos.
- En otro recipiente combinar todos los ingredientes secos.
- Mezclar los ingredientes secos con húmedos suavemente hasta formar una mezcla homogénea.
- Engrasar moldes para muffins y agregar maza en cada molde de a cucharadas para que todos queden con la misma cantidad.
- Hornear por 15 minutos aproximadamente o hasta que la punta de un cuchillo salga totalmente limpia.